martes, 7 de diciembre de 2010

Orientaciones Académicas para la Elaboración del Documento Recepcional. Licenciatura en Educación Primaria.


Presentación

Este documento está dirigido a los profesores y estudiantes de las escuelas normales que desarrollan las actividades correspondientes al séptimo y octavo semestres de la Licenciatura en Educación Pimaria. La elaboración del documento recepcional es uno de los tres tipos de actividades que los estudiantes normalistas realizan durante séptimo y octavo semestres, lo que exige una vinculación estrecha con el Trabajo Docente y con el Seminario de Análisis del Trabajo Docente.

Estas orientaciones tienen la finalidad de brindar un conjunto de recomendaciones y criterios en los cuales se basará la elaboración del documento recepcional que los futuros profesores presentarán para obtener el título profesional, por lo que, conviene aclarar, no se trata de un manual de redacción o de técnicas de investigación
I. El sentido formativo del documento recepcional
El propósito fundamental de las actividades académicas de los estudiantes normalistas durante los dos últimos semestres de su formación inicial es propiciar la relación entre el ejercicio de la práctica profesional que realizan con los niños de educación primaria, la reflexión sobre la experiencia obtenida en esta práctica y el estudio sistemático de los aspectos que dan sentido a esta experiencia sucesiva para enriquecerla.
La reflexión y el estudio que se relacionan con la práctica permiten obtener un producto académico: un documento recepcional con un sentido distinto a lo que suele ser normalmente este trabajo, concebido usualmente bajo la modalidad de tesis.

El trabajo docente, el análisis de las experiencias que de él derivan (que se lleva a cabo en el espacio de Seminario) y la elaboración del documento recepcional constituyen un conjunto de experiencias formativas que deben estar articuladas para que den los resultados esperados.
En los dos últimos semestres de la formación inicial se propicia que los estudiantes desarrollen una experiencia estructurada, sistemática, que permite conjugar los dos polos que integran una verdadera formación profesional: la teoría y la práctica. El contacto real con la práctica bajo la tutoría de un maestro experimentado, junto con la posibilidad de hallar sentido a lo que se hace y se observa, de desarmar, y mejorar esa práctica, son experiencias que ayudan a evitar deformaciones que suelen ser comunes en la formación profesional: el teoricismo o el empirismo.
En el desarrollo de las actividades del trabajo docente se propicia que la experiencia de los estudiantes normalistas se alimente con la reflexión, se busca que los alumnos tengan la capacidad de observar y de analizar para avanzar desde esas experiencias intelectuales hacia el estudio, hacia la bibliografía y hacia la teoría, y no a la inversa. La reflexión sobre el trabajo docente permite formar en los estudiantes una actitud de evaluación permanente y de mejoramiento de su desempeño como profesores. Esta vinculación entre acción y conocimiento da la oportunidad al estudiante de usar la investigación como herramienta para fortalecer su formación profesional; así mismo se busca generar en el estudiante normalista una actitud profesional, analítica, creativa y una disposición y capacidad para responder ante situaciones imprevistas, que permita al futuro maestro, disponer de un conjunto de alternativas pedagógicas; pero sobre todo, tener la disposición de adaptar sus formas de trabajo a las exigencias de la realidad, en lugar de tratar de adaptar la realidad de quien se educa a las formas de trabajo del maestro.
El sentido que tiene el documento recepcional como producto final de la formación en la licenciatura, es que constituye una importante experiencia de aprendizaje, pues al elaborarlo el estudiante ejerce las capacidades de pensar, analizar, argumentar, escribir y percibir sucesos. El documento recepcional no es, como se le suele considerar, un requisito de demostración final de competencia. Debe expresar el nivel de formación que ha logrado en relación con el perfil profesional definido por el Plan de Estudios; se trata de estudiantes que están culminando su formación inicial y no de investigadores, especialistas o maestros con un largo ejercicio profesional. Este criterio no devalúa el documento recepcional, sino que lo sujeta a parámetros realistas.
A través de un documento con estas características se pretende evitar que el trabajo final de los estudiantes se convierta en una experiencia inútil, poco genuina, costosa, desvinculada de la experiencia adquirida y que sólo sirve para cumplir un requisito burocrático.
El documento recepcional debe entenderse como un ejercicio intelectual derivado de la reflexión sobre la práctica para analizar en profundidad y explicar –con base en la experiencia y en los aportes teóricos pertinentes – un problema educativo concreto que dé cuenta de las condiciones reales en las que se realiza la labor docente, de los factores que intervienen e influyen en ella y de las relaciones que se dan entre éstos y las formas en que funciona y se organiza la escuela. Es un ensayo de carácter analítico y explicativo en cuya elaboración los estudiantes normalistas ponen en juego las competencias que forman parte de los rasgos del perfil de egreso que establece el Plan de Estudios, especialmente los que corresponden al campo de las habilidades intelectuales específicas. Los logros de otros rasgos del perfil de egreso se manifiestan en el desempeño mismo del estudiante, en las distintas actividades que implica el trabajo docente.
II. Criterios básicos para la elección del tema y el planteamiento del problema
La precisión del tema que será objeto de análisis para elaborar el documento recepcional tiene como principal referente el conjunto de conocimientos y experiencias adquiridos en el estudio y en el trabajo con los niños, así como los que resultan del intercambio y el análisis de la práctica que se lleva a cabo en el espacio de Seminario.
En el momento en que el estudiante tiene claro el tema que desea desarrollar, es necesario precisarlo, acotarlo de tal manera que su análisis sea factible en el tiempo y las condiciones reales del trabajo que realiza en la escuela primaria. La elección inicial del tema o la cuestión que interesa al estudiante desarrollar es la base para decidir la línea temática en la cual se inscribirá, lo que permitirá decidir el tipo de tratamiento que se dará a dicho tema.
Los Lineamientos para la Organización del Trabajo Académico durante el Séptimo y Octavo Semestres señalan tres líneas temáticas en las que pueden inscribirse los temas del documento recepcional; el referente fundamental en cualquiera de las tres líneas es el trabajo docente que se desarrolla en el aula y en la escuela primaria.
1. Línea temática Análisis de experiencias de enseñanza
Esta línea abarca temas relacionados con alguna experiencia que el estudiante haya desarrollado en el grupo de educación primaria y que desee analizar con mayor detalle, ya sea en la enseñanza de alguna asignatura en general o de algún contenido particular de asignatura.
En los trabajos referidos a una asignatura se incluirá el análisis de los propósitos del plan de estudios de educación primaria, los principios en que se sustenta el enfoque de enseñanza, las estrategias didácticas utilizadas y su relación con el enfoque, las formas de evaluar, el uso que se hizo de los recursos didácticos, así como el papel que jugaron el estudiante normalista al enseñar y los niños durante las actividades propuestas.
Los trabajos centrados en contenidos específicos de alguna asignatura se enfocarán al análisis de los procesos que siguieron los niños durante las clases que se analizan. Ello permitirá analizar, por ejemplo, cómo es que lograron (o no) la adquisición de las nociones en juego, cómo usaron sus conocimientos previos, cómo influyeron tanto las opiniones y argumentos surgidos en el grupo durante las clases como las estrategias y recursos utilizados.
El estudiante podrá seleccionar experiencias entre las que ha vivido en el tiempo dedicado al trabajo docente de acuerdo con los siguientes criterios:
a)  Las experiencias de enseñanza que hayan resultado para el estudiante normalista:
  • Difíciles.
  • Exitosas.
  • Novedosas.

b)  Las dificultades, retos o logros que representó el aprendizaje de la asignatura para los niños y su relación con los siguientes aspectos:
  • Los contenidos de la asignatura.
  • Las formas de enseñanza utilizadas.
  • El dominio de contenidos por parte del estudiante.
  • Las características del grupo.
La elaboración de un trabajo de análisis de experiencias será útil al estudiante normalista porque una revisión detallada de algunas sesiones de clase de una asignatura en la que se reconoce tener mayor facilidad o dificultades para favorecer que los niños aprendan, le ayuda a conocer mejor las características de esa asignatura y a identificar, en las acciones concretas de enseñanza que se llevaron a cabo, los factores que favorecieron o impidieron el logro de los propósitos planteados; si los problemas que se enfrentaron, por ejemplo, están relacionados con el conocimiento y la comprensión del estudiante sobre el enfoque, con sus habilidades para utilizar las estrategias adecuadas en el momento oportuno, con la capacidad para organizar el trabajo en el grupo, para entender lo que los niños hacen mientras trabajan los contenidos de la asignatura, etcétera.
El desarrollo de un tema en esta línea requiere que se precisen los aspectos que permiten ubicar el contexto en el que se llevó a cabo la experiencia por analizar:
a)  El grado escolar en el que se llevó a cabo.
b)  Los elementos en que se centrará el análisis:
  • Si se va a referir a la experiencia de enseñanza de una asignatura en general.
  • Si se enfocará al análisis de uno o varios contenidos de una asignatura.
c)  La secuencia de las clases que se analizarán, con el propósito de contar con elementos suficientes para explicar los aspectos que se consideren relevantes, en un contexto suficientemente amplio que permita entender la relación entre una clase y otra, entre las estrategias utilizadas y las acciones que a partir de ellas realizan los niños.
2. Línea temática Análisis de casos de problemas comunes de la práctica escolar y el funcionamiento de la Escuela
Los trabajos inscritos en esta línea temática se refieren al análisis de casos que se hayan identificado en el grupo con el que se trabaja, sobre algún tema como nivel y naturaleza del aprendizaje, reprobación, ausentismo, disciplina, formas de evaluación, atención a necesidades educativas especiales. Para analizar temas de esta naturaleza es necesario caracterizar el problema educativo, sus causas, su impacto en el desenvolvimiento del niño y en el logro de los propósitos educativos, así como la participación real y la esperada del maestro, la escuela y los padres de familia en la solución del problema.
El estudiante podrá seleccionar un problema relevante que sea de su interés, atendiendo a los siguientes criterios:
a)  Que sea un problema real, detectado en el grupo de práctica.
b)  Que existan por lo menos dos casos de niños que presenten ese problema.
c)  Que el análisis del problema sea viable; es decir, que se disponga de fuentes de información accesibles y que el estudiante posea los conocimientos básicos sobre el tema.
El desarrollo de este tema, o de otros que pertenecen a la misma línea, requiere del análisis en detalle de los casos elegidos, lo que implica la necesidad de indagar y obtener información sobre los antecedentes de los alumnos, a través de un seguimiento de su trayectoria escolar y del estudio del ambiente familiar y social en que viven. Exige que el estudiante normalista prepare actividades específicas que desarrollará –durante el tiempo destinado al trabajo docente y de acuerdo con el tutor– para apoyar a los alumnos que enfrentan el problema que se analiza.
En caso de que, como parte de esta línea temática, se desee optar por cuestiones más generales como desigualdad educativa, fracaso escolar, gestión escolar o la influencia del ambiente familiar en el proceso educativo, además de la revisión documental, el análisis deberá referir casos específicos, incluyendo evidencias obtenidas en la escuela primaria o zona escolar donde se realiza el trabajo docente.
3. Línea temática Experimentación de una propuesta didáctica
Los trabajos que se ubican en esta línea tienen como finalidad que el estudiante diseñe, aplique y analice una secuencia didáctica cuyo tema central esté relacionado con los propósitos educativos básicos o contenidos temáticos fundamentales; el propósito es someter a prueba la secuencia didáctica y evaluar su eficacia, es decir, valorar en qué medida permite mejorar los resultados o solucionar problemas detectados. La elección de un tema dentro de esta línea temática se realizará bajo los siguientes criterios:
a) Tener en cuenta el grado escolar para el cual se elaborará la propuesta didáctica.
b) Prever el número de sesiones de clase en que se desarrollará con el grupo como parte de las actividades del trabajo docente (tomando en cuenta que se requiere tiempo suficiente para analizar y sistematizar la información, así como para ir ajustando la secuencia didáctica de acuerdo con los resultados que se vayan obteniendo).
c) Convenir con el maestro tutor los tiempos que se destinarán al desarrollo de la propuesta, puesto que el tema que se elija no necesariamente será de los que el tutor asigne al estudiante normalista de acuerdo con la secuencia del programa.
El diseño, la aplicación y el análisis de una secuencia didáctica permitirá al estudiante explorar y explicar los procesos que siguen los niños en el desarrollo de las actividades propuestas y los logros que se obtienen a través de ellas. Además, le permitirá analizar su propia práctica e identificar los problemas reales que se enfrentan al aplicar las estrategias diseñadas para favorecer el logro de los propósitos previstos.
III. Las características del proceso de elaboración
Lo que distingue a una buena investigación de otra que no lo es, no son las características formales o de procedimiento sino la pertinencia, el rigor y la seriedad de los argumentos y datos, la claridad y la congruencia expositivas, la imaginación y la honestidad intelectual.
Se busca que al elaborar el documento recepcional los estudiantes se acerquen a la realidad con una actitud analítica que les permita reconocer en ella los sucesos que merecen revisarse con mayor atención; con una actitud crítica para valorar su propio papel como docentes y su influencia en el proceso educativo, en especial en los logros que muestran sus alumnos; con imaginación para diseñar soluciones innovadoras frente a viejos problemas y, sobre todo, para actuar con iniciativa y creatividad frente a los retos del trabajo cotidiano. Se pretende, pues, que como resultado de este proceso, los futuros profesores obtengan un trabajo cuyo contenido esté basado en un esfuerzo intelectual real, en lo que son capaces de hacer y que, sobre todo, sea un ejercicio de aprendizaje estrechamente vinculado con su experiencia y con una reflexión verdadera sobre lo que hacen y observan.
1. Los espacios en que se elabora el documento recepcional
El documento recepcional es producto de un trabajo sistemático de reconstrucción de la experiencia, de recolección y análisis de la información derivada del trabajo docente, así como de estudio en fuentes documentales:
a) La escuela primaria, como el espacio fundamental en el cual se produce la experiencia del estudiante, es la principal fuente para recoger la información necesaria sobre los alumnos (sus características, sus reacciones, sus logros y dificultades), sobre el propio desempeño del estudiante en las tareas que le corresponde realizar y sobre la escuela, los actores que participan en ella y su influencia en el proceso educativo. En la escuela primaria se obtiene la información que puede ser útil para explicar los hechos o procesos que el estudiante haya seleccionado para analizar y explicar en el documento.
b) La escuela normal. En ella se llevan a cabo actividades que propician el intercambio de experiencias, la búsqueda de información y la obtención de orientaciones que requieren los estudiantes para avanzar en el desarrollo del documento recepcional. Los espacios de trabajo con estas actividades son los siguientes:
·         El Seminario de Análisis del Trabajo Docente, en el cual los estudiantes reflexionan sobre la práctica, analizan e identifican retos pedagógicos.
·         La asesoría individual que recibe el estudiante para plantear sus inquietudes, preocupaciones y dificultades tanto en el desarrollo del trabajo docente como en el correspondiente al documento recepcional. Esta asesoría la brindan tanto el asesor de Seminario como el profesor que comparte esta responsabilidad en relación con el tema central del documento.
·         La consulta en biblioteca. La construcción del trabajo recepcional requiere dedicar tiempo específico a la búsqueda de información para conocer sobre el tema seleccionado; de este modo es posible contrastar la información e hipótesis que surgen del trabajo de enseñanza con los aportes de algún autor sobre el tema particular. Esta actividad se realiza en los tiempos que cada estudiante determine, de acuerdo con las condiciones personales.
·         El trabajo individual y autónomo que los estudiantes deberán realizar en otros espacios y momentos. Al respecto, es indispensable la organización del tiempo de que dispone el estudiante para prever las acciones a realizar durante el trabajo docente (por ejemplo la recolección de la información necesaria) y para redactar el documento.
2. La información sobre el tema
El interés personal por estudiar en profundidad un tema o problema educativo está vinculado con la necesidad de conocer más sobre el mismo, de comprenderlo en su naturaleza, sus orígenes o sus implicaciones en el proceso educativo de niñas y niños.
En el proceso de elaboración de este documento, una condición indispensable es saber sobre el tema; sólo así será posible plantearse propósitos claros, es decir, saber qué se quiere estudiar de ese tema y para qué; a qué fuentes es necesario recurrir, hasta dónde es factible llegar en el análisis y qué tipo de información es necesario recoger.
Para contar con la información necesaria sobre el tema central del documento recepcional es necesario llevar a cabo las siguientes actividades:
a) Revisar, entre el conjunto de programas y materiales de apoyo para el estudio, aquellos que tienen relación con el problema que se va a analizar en el documento.
b) Seleccionar los textos que sean efectivamente útiles, necesarios y pertinentes en relación con el tema a analizar. La bibliografía básica sugerida en los programas de estudio y en la Guía de Seminario de Análisis del Trabajo Docente es un referente básico para la búsqueda de textos sobre temas diversos.
c) Revisar de nueva cuenta el expediente personal y el diario de trabajo que los estudiantes fueron elaborando durante los semestres anteriores.
Una actitud de búsqueda permanente y de cuestionamiento constante sobre lo que se intenta analizar y sobre los hallazgos durante el proceso, permite elaborar y aportar ideas propias pero fundamentadas tanto en la experiencia como en el conocimiento académico que existe respecto al tema.
3. La precisión de los aspectos a analizar
Una condición indispensable para determinar los aspectos que se analizarán en el documento recepcional es contar con información básica sobre el tema mismo, sobre las características de los niños del grupo, las actividades realizadas por el estudiante y por los alumnos del grupo, las condiciones en que se llevó a cabo el trabajo, entre otros elementos.
Para elaborar el documento recepcional es indispensable plantearse preguntas, no sólo al inicio sino durante el proceso de elaboración. Que el estudiante tenga claridad respecto a lo que desea hacer durante el trabajo docente, lo que quiere documentar, las formas en que puede proceder para que el trabajo sea sistemático y logre los propósitos que se ha planteado, son condiciones necesarias para precisar los aspectos que serán analizados y que darán contenido al documento.
IV. La recolección de la información
La base para el análisis de los resultados de la práctica educativa ha sido, desde el inicio de la carrera, la información que los estudiantes normalistas obtienen mediante el estudio sistemático, la observación y el trabajo en el aula y en la escuela primaria y la reflexión sobre su propio desempeño. En este proceso continuo han desarrollado las habilidades básicas para discernir entre la información que es relevante registrar de acuerdo con los eventos o sucesos que deben ser objeto de análisis, reflexión y discusión, y que pueden a la vez dar evidencia de situaciones o problemas que es necesario revisar con mayor atención.
Para realizar un trabajo organizado y estar en posibilidad de analizar la información, es indispensable tener ideas precisas acerca del tipo de información que se requiere recoger (en el aula, en la escuela y en otros espacios, si es el caso), para qué va a servir y cómo se va a obtener.
Los periodos dedicados al trabajo docente son a la vez el espacio más propicio para recoger la información requerida, tanto para el análisis que se lleva a cabo en el Seminario, como para dar contenido al documento recepcional. La recopilación de la información depende de los aspectos centrales que el estudiante haya decidido analizar; por ello, conviene que, con base en esas preguntas  definan qué información es necesaria para responderlas y qué medios e instrumentos conviene utilizar en la recolección de información que sea útil, pertinente y suficiente para describir, explicar el hecho o los procesos estudiados y demostrar las conclusiones obtenidas.
Los recursos para obtener la información
De acuerdo con el sentido formativo del documento recepcional, los medios para recoger la información deben estar al alcance de los estudiantes, de modo que puedan realizar esta tarea durante los periodos de trabajo docente, sin descuidar o dejar de cumplir las actividades académicas que éste implica. Para ello, es conveniente que utilicen los medios con que se han familiarizado en el trayecto de su formación y los documentos que han elaborado como parte de sus actividades de estudio.
V. La sistematización y el análisis de la información
La revisión continua del trabajo que se desarrolla en la escuela primaria permite, por una parte, resolver las situaciones que se van presentando en el trabajo cotidiano, y por otra, organizar la información de manera inmediata a la experiencia, evitando así que se pierdan en el olvido datos o detalles importantes para el análisis de los aspectos centrales del documento recepcional.
Por las razones expuestas es necesario que la sistematización de la información se realice de manera simultánea al trabajo docente. Hacerlo de esta manera permitirá detectar posibles insuficiencias en la obtención de datos, necesidades de revisión en fuentes bibliográficas o identificar nuevos problemas que pueden enriquecer el análisis del tema principal. Además, los estudiantes podrán detectar aspectos específicos que requieran atenderse en relación con la línea temática a la que corresponde el tema elegido. Por ejemplo, si el tema corresponde a la línea de experimentación de una propuesta didáctica, será necesario que el estudiante revise los resultados de cada una de las clases que integran la secuencia didáctica, para hacer las modificaciones que se requieran de cuerdo con los propósitos previstos y los logros o dificultades que identifique en el trabajo realizado con los niños.
La sistematización de la información para elaborar el documento recepcional implica las siguientes acciones:
a) Valorar la información y seleccionarla. Como se ha señalado, las preguntas que inicialmente se plantea el estudiante para decidir los aspectos a analizar en el documento, son útiles para saber qué información se necesita recoger.
b) Clasificar la información. Al revisar con detalle la información de que dispone, el estudiante tendrá posibilidades de reconocer cuál es útil para responder cada una de las preguntas que se ha planteado. El uso de instrumentos diversos en el acopio de información permite comparar datos para reconocer similitudes y diferencias entre situaciones o casos o para identificar constantes.
c) Responder a las preguntas planteadas inicialmente. De acuerdo con las características del tema elegido y con los aspectos concretos que se desea analizar, es necesario reflexionar acerca de cómo se pueden responder cada una de las preguntas iniciales que guiaron la recolección de información.
La descripción ayuda a relatar lo que se hace o se percibe, destacando las características que permiten dar a conocer esos hechos con claridad. Los testimonios o situaciones surgidas en el trabajo docente son importantes como evidencias de la información que se recoge, pero no basta con seleccionarlos e incluirlos en el documento recepcional; es necesario, en cada caso, exponer con claridad los detalles que permitan al lector tener una idea precisa del asunto referido en relación con el aspecto que se analiza. Al describir, se tendrá cuidado de que la información no se quede en un simple recuento anecdótico de los hechos, sino que ayude a dar cuenta de los aspectos centrales que interesa mostrar.
VI. El esquema de trabajo
Es necesario elaborar un esquema de trabajo que, con sentido práctico, ayude al estudiante normalista a orientar el proceso de elaboración de su documento recepcional, a organizar y prever las actividades que realizará durante el tiempo de que dispone para reunir la información, sistematizarla y analizarla, y para redactar el contenido correspondiente. El esquema de trabajo incluirá los siguientes elementos:
1.   El tema o problema y su ubicación en la línea temática.  Es fundamental precisar el tema central que se va analizar, delimitando con precisión el grado escolar, la asignatura, el contenido o el aspecto al que se orienta el análisis de casos respecto a un problema educativo concreto.
2.   Los propósitos del estudio. Se incluirán las respuestas a preguntas como ¿para qué va a ser útil al estudiante el análisis del tema seleccionado? y ¿qué se pretende lograr a través de él? Ello permitirá, además de decidir la línea temática, valorar las posibilidades reales para llevar a cabo el análisis del tema o el problema elegido.
3.   Lo que se sabe sobre el tema. Se enunciarán los conocimientos generales que el estudiante tiene sobre el tema y se apuntarán las ideas referentes a lo que hace falta saber al respecto.
4.   Las preguntas que se pretende responder. La finalidad de que el estudiante se plantee preguntas concretas desde que inicia el proceso de elaboración de su documento, es contar con un referente para orientar su trabajo hacia los propósitos que persigue y tener claridad sobre los aspectos relevantes que –en relación con el tema de análisis – deberán atenderse en los periodos del trabajo docente.
5.   Las actividades y las fuentes de consulta. Este apartado incluirá un listado de las actividades generales que deberá prever el estudiante para reunir la información requerida (de acuerdo con el tema elegido y con base en los criterios establecidos en los capítulos anteriores de este documento). Además, es necesario señalar los textos de apoyo cuyo contenido sea pertinente en relación con el tema o el problema que se analizará. Hay que recordar que la bibliografía que se registre en el documento será aquella que en verdad se consultó y fue útil para desarrollar el tema.
6.   El calendario de trabajo. Este calendario tiene como finalidad la organización del tiempo y la distribución de las actividades que implica la elaboración del documento recepcional en los dos últimos semestres de la licenciatura. El calendario mostrará la distribución del tiempo que cada estudiante haga, tomando en cuenta el trabajo docente (incluyendo el tiempo que se requiera para recoger información fuera del tiempo de clases), el tiempo destinado al estudio autónomo, al Seminario de Análisis del Trabajo Docente, a la sistematización y análisis de información, y a la redacción de los capítulos que integrarán el documento recepcional.
VII. La estructura del documento recepcional
La estructura del documento, de acuerdo con lo señalado anteriormente, deberá responder a las necesidades de la exposición según la línea temática en que se inscribe el trabajo.
1. Estructura
Atendiendo a estas consideraciones la estructura del documento no deberá sujetarse a un esquema rígido que establezca de antemano el número de capítulos y los contenidos de los mismos. A continuación se enuncia la estructura mínima del documento recepcional.
1.   Introducción. El estudiante presentará en términos generales el contenido del trabajo: el tema seleccionado, las razones personales para seleccionar ese tema, los propósitos de estudio que se propuso y los que alcanzó, así como las actividades de indagación que realizó, las dificultades que enfrentó al realizar el trabajo y la utilidad que para su formación profesional le reporta el trabajo.
2.   El tema de estudio. Según la línea temática elegida, en este apartado el estudiante incluirá una descripción del tema de estudio y las preguntas centrales que se propuso responder en su desarrollo, así como los conocimientos (obtenidos de la experiencia y de la revisión bibliográfica) que hacen que esas preguntas sean importantes de responder en su formación profesional y en el conocimiento del hecho o proceso educativo seleccionado. En este apartado es donde se incluye una descripción general del hecho o casos estudiados, del lugar donde se realizó (escuela y ubicación geográfica, algunas características sociales relevantes) para que el lector ubique la información que se presentará posteriormente.
3.   El desarrollo del tema. Esta parte está dedicada a responder las preguntas centrales formuladas por el estudiante y cuya respuesta se ha buscado a través de las actividades de indagación: incluye la descripción de los casos estudiados o la reconstrucción de las secuencias didácticas, la explicación y la demostración de las conclusiones respecto a las respuestas de cada pregunta. Este apartado puede estar formado por varios capítulos; la denominación de éstos dará idea clara de su contenido.
4.   Conclusiones. En esta parte el estudiante expone en forma sintética las respuestas a las preguntas que formuló para realizar su estudio, explica en qué casos obtuvo respuestas provisionales y señala los nuevos problemas que el estudio le permitió descubrir.
5.   Bibliografía. Finalmente, es necesario que el estudiante incluya una relación de los textos (capítulos de libros, artículos) efectivamente consultados durante la elaboración del trabajo.
6.   Anexos. En este apartado, si se considera indispensable, se incorporarán muestras del trabajo de los niños, planes de clase e instrumentos utilizados que permitan al lector constatar las formas en que se procesó la información.
2. Características de la presentación
Las principales características que deben cuidarse en los documentos recepcionales son su legibilidad, su coherencia argumentativa y la fluidez y claridad en la exposición de las ideas. Al igual que la estructura, la dimensión del documento sólo puede ser definida según la información recogida, el tratamiento de la misma y el estilo de exposición. Atendiendo a las características enunciadas anteriormente se sugiere tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
a) Extensión. El documento recepcional tendrá una extensión mínima de 45 cuartillas de contenido, excluyéndose la bibliografía y los anexos (dedicatorias, testimonios u otros) que decida incluir el estudiante.
b) Apoyos gráficos. Este tipo de apoyos se refiere a los recursos para manejar y presentar la información (cuadros, gráficas u otros). El uso de fotografías es innecesario en un documento de esta naturaleza, cuyo contenido está centrado en el análisis de la tarea educativa y de los hechos y problemas que lo caracterizan.
c) Características tipográficas. Éstas serán determinadas por el colegio de profesores que atienden el Seminario de Análisis del Trabajo Docente, cuidando que las exigencias sobre este aspecto no imperen sobre las características académicas del documento recepcional ni demanden gran inversión de tiempo y de recursos económicos.

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